En enero de 2010 María Aviñó y yo iniciamos un nuevo proyecto, pusimos en marcha un sueño. Tras una larga temporada en Francia pude conocer de primera mano cómo funciona la fisioterapia en diferentes países europeos. Fue la experiencia adquirida allí trabajando como fisioterapeuta y el intercambio de conocimientos con otros colegas de profesión de distintas nacionalidades lo que me llevo a querer tener mi propia clínica.
Empezaba un nuevo reto para nosotros, poner en marcha una nueva empresa, lo cual como ya sabemos no es nada fácil, había que añadir la época que nos había tocado, pero eso no fueron más que motivaciones para proseguir y sacar este proyecto adelante. Sabíamos que con el esfuerzo y la ilusión que teníamos, la idea de ser algo creado por nosotros con lo que poder prestar un servicio de calidad en el lugar donde crecí merecía la pena e iba a salir bien.

El objetivo era dar a conocer una forma de hacer fisioterapia, enseñar que no sólo éramos un centro donde la gente podía recibir masajes, sino un centro en el que encontraran la solución a problemas de salud relacionados con el dolor y el movimiento, porque en el siglo XXI todo el mundo debe saber que los fisioterapeutas somos especialistas del dolor y especialistas del movimiento.

Así nació el Centro de Fisioterapia Pablo Salazar, un centro situado en la plaza del ayuntamiento en el que los vecinos de Tomares y alrededores tuvieran la oportunidad de ser tratados como se merecen. Queríamos ofrecer tratamientos individualizados con calidad y profesionalidad, porque lo más importante es la salud del paciente.

En busca de esta calidad en el servicio en nuestros inicios nos dedicamos exclusivamente a la fisioterapia, que, como a día de hoy, nos ocupábamos de las dolencias diarias de la población y de la recuperación de deportistas amateur y profesionales. En ese entonces disponíamos de un local pequeño y con limitación de espacio pero gracias a la imaginación y el trabajo que desarrollábamos éramos capaces de dar un servicio de calidad.

Conforme avanzó el tiempo y aumentó la demanda de nuestros servicios pudimos pensar y poner en práctica un proyecto más amplio, más ambicioso, sin perder nuestras señas de identidad, la profesionalidad y la calidad, decidimos ofrecer un servicio multidisciplinar.

Para llevar a cabo esta segunda fase del proyecto tuvimos que cambiar de localización, nos trasladamos a la calle Clara Campoamor (rotonda del instituto). En este nuevo local teníamos espacio para aumentar los servicios y poder dar a nuestros pacientes un servicio más integral, por lo que comenzamos a rodearnos de profesionales de otras áreas relacionadas con la salud.

Así llegamos al día de hoy en el que ponemos en marcha después de 2 años de adaptación un nuevo proyecto, el centro de fisioterapia Pablo Salazar se ha transformado en QL CLINIC, con el objetivo de seguir en nuestra lucha por la calidad ofreciendo un espacio en el que poder recibir tratamiento de fisioterapia, podología y nutrición.

Siempre tuvimos la idea de promocionar la salud, creemos que gracias a la profesión que desempeñamos estamos en la obligación de intentar transmitir a la población hábitos de vida saludable, es por ello que recientemente decidimos poner en marcha una nueva iniciativa. A principios de este 2015 nació este blog, en el que abordamos aspectos y temas relacionados con la salud.

En este nuevo proyecto queremos ofrecer un servicio integral a nuestros pacientes, añadiendo las áreas de podología y nutrición, componiendo así un equipo con el que prestar un servicio más completo, proporcionando un abordaje global del paciente que lo requiera.

Además disponemos de un espacio dentro del centro en el que desde las disciplinas que trabajamos ofrecemos talleres y charlas informativas para pacientes sobre temas de salud relacionados y programas de formación para profesionales.

Por último aprovecho para dar las gracias a todos los que han hecho que este proyecto se haga realidad, a Lola y Antonio por apoyarme y animarme a poner este proyecto en marcha, junto a amigos que de forma desinteresada han colaborado para llevarlo a cabo, y por supuesto a María con la que inicie ese pequeño proyecto y con la que me embarco en este nuevo.

Por supuesto también a los nuevos integrantes de este proyecto, a los cuales nuestros pacientes ya conocen.

Como no, me gustaría terminar dando las gracias a nuestros pacientes, gracias a vuestra confianza estamos consiguiendo que todo esto salga adelante y que sean cada vez más personas las que se benefician de un servicio de calidad.